Después de un tiempo de inactividad en el blog y para celebrar el 1er aniversario desde que empezamos con esto, os contaremos como fue nuestra última aventura en el Delta del Ebro.
Todo empezó con la nueva incorporación al equipo, se trata de la QUICKSILVER 455 ACTIV OPEN, una embarcación pequeña pero con un buen motor de 60 cv que ofrece unas prestaciones muy buenas.
Este año, a diferencia de años anteriores que íbamos al Pallars a por truchas, con la adquisición de la nueva embarcación decidimos apostar por una semana de pesca diferente, y que mejor opción que el Delta del Ebro: Tallhams, palometones, lubinas, bonitos, bacoretas, atunes, llampugas.... esto es lo que esperábamos encontrar o almenos algunos de ellos.
Alquilamos un apartamento en la población de Riumar y acertamos por completo. La embarcación la pudimos amarrar también en el puerto de la misma población por una semana a un precio muy razonable y para allí que nos fuimos.
Durante la primera semana de octubre en esa zona todavía se respira verano y la población de mosquitos está en su punto más alto.
Al llegar el primer día echamos la barca al agua y nos fuimos a comer con la idea de salir al río por la tarde a probar los tallhams, pero estos no se presentaron a la cita, ni a esta ni a las demás citas a las que nosotros acudimos en los días siguientes. Al final, hablando con la gente de allí y viendo los resultados de otros pescadores nos enteramos que no estaban por la zona.
El otro factor que nos dejó K.O. fue el viento y el estado del mar que nos dificultaba la salida por la desembocadura y nos privaba de pescar con cierta comodidad o incluso hacia imposible la pesca.
Pero no fue todo tan mal!!! También tuvimos días buenos.
Por suerte, aunque no con el tamaño deseado, dimos con algunas pajareras de caballas que traían tras de sí a otros depredadores que nos brindaron bonitas picadas y algunos ratos buenísimos. De esta forma dimos con bacoretas, bonitos, serviolas y unos cuantos miniatunes que peleaban de una forma brutal!!!
Los senyuelos que nos dieron mejor resultado en estas situaciones fueron los jigs, en especial el SUPER SURGER de SMITH.
Ciertamente nos hubiera gustado que todos estos estuvieran un poco más creciditos pero a falta de pan buenas son migas, o eso dicen y la verdad es que disfrutamos muchísimo.
La otra especie que nos trajo de cabeza y que finalmente pudimos dar con ellas fueron las llampugas. Que saltos! que nervio! y que colores!! No habíamos tenido nunca ninguna entre las manos. Estas se mostraron muy selectivas con los señuelos y el más eficiente fue el paseante de superfície PRO - Q de SEASPIN 90 mm.
Conseguimos subir unas cuantas a bordo que fueron devueltas al agua, como todos los demás pequeñines.
Y así pasamos los días. Al principio nos costó un poco dar con los peces, pero les fuimos cogiendo el tranquillo y aprendimos mucho de cómo localizarlos, horario, profundidad, zonas...
A ver si el año que viene repetimos pero más para septiembre que es cuando hay más actividad.
Saludos.