La previsión meteorológica se presentaba inmejorable, con muy poco viento y el mar en calma.
Empecé la jornada en una zona rocosa que se extendía hasta los 50 metros de profundidad. La zona en cuestión normalmente presenta una fuerte corriente que en ocasiones dificulta la pesca a esta profundidad, pero no seria el caso y la corriente permitía unas derivas perfectas.
Al poco tiempo obtuve la primera picada, saliendo un pequeño dentón que enseguida fue devuelto al agua.
El día no podía empezar mejor, por lo que volví a repetir algunas derivas por el mismo sitio.
Al no obtener ninguna otra picada cambié de piedras y deriva tras deriva fui viendo que el día seria mucho más duro de lo que parecía de inicio, y obtener una nueva captura no seria tarea fácil.
Llegado ya el mediodía apareció la segunda captura de la jornada, un cabracho de buen tamaño que entró a un vinilo bexafish. Cabe decir que estos vinilos nos están empezando a dar buenos resultados.
Al igual que en caso del dentón la picada se dio en un fondo rocoso cercano a los 50 metros de profundidad, por lo que dediqué el final de la jornada a pescar zonas relativamente profundas.
Después de un par de tímidas picadas que no se clavaron, conseguí sacar un pequeño espetón, que entro al borde de una pendiente de roca. Con esta pieza di por terminada la jornada.
Después de probar varios tipos de recogida y diferentes señuelos los que marcaron la diferencia fueron los vinilos en recogidas lentas en dientes de sierra. Supongo que, debido a la época del año y a que el agua finalmente se está enfriando, la agressividad de los peces a bajado mucho y las recogidas mas enérgicas no funcionaron en absoluto. Tendremos que probar con mas tiempo señuelos que permitan pescas lentas. Pero bueno ya sabemos que teorías hay para todos los gustos....Haha
Aquí os dejo un pequeño vídeo de las capturas:
Saludos y buena pesca.
